Invertir tiempo en técnicas de interioridad o inteligencia intrapersonal
Sin trabajar las emociones y la autoestima es completamente imposible que pretendamos el desarrollo integral del alumno. Nadie podrá hacer una buena narración de sí mismo desde la falta de seguridad o desde un concepto pobre .
Invertir en los alumnos actuando sobre la vida real
Los alumnos pueden participar en la mejora de la escuela y su entorno (ciudad, pueblo o barrio en el que se enclava la escuela). Por ejemplo, alumnos que investigan acerca de los usos del espacio de recreo y de su diseño físico. Las posibilidades de relacionar esta cuestión con determinados contenidos curriculares y esta forma de participar en el diseño de los espacios alteran las prioridades tradicionales en el uso de los espacios y revierten en una transformación de las reglas de uso y poder en las instituciones (Pupils at Wheatcroft Primary)
Invertir esfuerzos en salir del aula
Tender puentes y generar conexiones con otras áreas o experiencias que tienen lugar fuera, así la experiencia vital de los compañeros saldrá de esa especie de “reserva india” que son nuestras aulas. La comunicación será viva y no adecuada a una situación que es puro “simulacro”.
Invertir más tiempo en actividades gamificadas
Este extra no solo desarrollaría la creatividad de nuestros escolares sino que también sería un acicate extraordinario para su participación activa evitando ese silencio que es negación a la participación activa, falta de capacidad de respuesta
Invertir silencio por voz del alumnado
Las prácticas cuyo objeto es mejorar el currículo escuchando la voz del alumnado se sirven de mecanismos diversos de negociación del currículo que afectan a la organización y selección de contenidos, de actividades de aula, de los modos de evaluación y de cualquier otro elemento curricular .